Entiendo a cada persona que acompaño como experta en sí misma y yo como experta en ese acompañamiento respetuoso que camina a su lado.  Desde esta mirada entiendo el proceso terapéutico como un encuentro profundo entre dos personas, que trabajan conjuntamente para explorar y descubrir sus recursos y las potencialidades de las que ya dispone. Ese autodescubrimiento la ayudarán a construir nuevas posibilidades, nuevos caminos para transitar con mayor confianza y autoconocimiento los procesos de su experiencia. 

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Considero fundamental crear un espacio humanizado sostenido por la escucha, la comprensión y la empatía.  Creo imprescindible ayudar a sostener, transitar y validar los procesos de cada persona. A través de diferentes propuestas, se crea un espacio respetuoso con cada mujer y sus ritmos, para acompañar aquellos sentimientos y vivencias que van surgiendo al transitar diferentes momentos de su vida.

 

La atención y el apoyo en psicoterapia es un viaje esperanzador y reparador.  Este acompañamiento  te ofrece un espacio para sentirte acogida, escuchada y sostenida con lo que va surgiendo para ti, un espacio de autodescubrimiento, aprendizaje y crecimiento personal.